No soy triste, es un mal sueño


Hay quien me trata de triste a la hora de escribir.
Que en falta se echa en mis versos, la alegría de vivir.
Que no hablo de princesas, de colores, de reír…
Que me enmarco en la desgracia, y piensan que por que sí.
Que quizá no tenga alma, que no conozca el sentir,
O que simplemente escriba, por el algo que decir.
Que perdonen mis lamentos, sé que no tengo derecho
A contarles mis tristezas, a quien vino a leer risueño.
Hoy quiero que se me entienda, No es que sea de mal agüero,
Es como noto la vida por desgracia de hace tiempo.
Que se castiga mi pluma, que en demasía pago mi verbo.
Hasta llegar al punto, que los míos paguen por ello.
No tengan derecho a un trabajo, a un plato en su sustento,
Y todo porque un “valiente”, ordena y manda en sus fueros.
Créeme, yo no soy triste…me están matando por dentro.
Solo te cuento la historia, de un Sr. Feudal y el que quieren sea su siervo.
Mago Blanco

